HARÁN DE LOS CEMENTERIOS SUS CATEDRALES Y DE LAS CIUDADES VUESTRAS TUMBAS - Darío Argento y Lamberto Bava, 1985



CINE-FÓRUM LITERARIO PARA EL DESARROLLO DE UNA CULTURA APOCALÍPTICA Y EL ESTUDIO DE LA DEMONOLOGÍA

martes, 19 de septiembre de 2023

Lluvias de otoño

 



En la proximidad del otoño, y acompañando a las nubes de tormenta que traen la lluvia, el ensombrecimiento progresivo de los días y la tiniebla espiritual. Una retrospectiva de la década de los ochenta y de la infancia de entonces, haciéndonos mirar al recuerdo y a los propios miedos, quizás algún personaje nos sirve de espejo en ese sentido. Habla del miedo como alimento para los demonios que acechan desde las regiones oscuras de la realidad, y habla, tal vez, de un proceso a través del cual logran vencer el miedo y, en consecuencia, vencer a las entidades demoníacas. Hay un pacto de sangre, de lealtad y compromiso respecto a una idea de lucha contra al mal, no un mal cualquiera, ni simplemente humano, sino esas inteligencias malignas, demonios, que se esconden bajo las enfermedades mentales, los sueños de la mente, la materialización de los miedos, o cualquier otro aspecto a reseñar. It, de Andy Muschietti. 


"Sobre la infancia y la imaginación. Lo que fue un acto de Fe, creer que en lo profundo de los juegos de la infancia, juegos ante todo imaginativos, habitan realidades espirituales e invisibles, inteligencias malignas que aprovechan el mundo imaginario para tomar forma y alimentar el miedo. Por otra parte, la unión y la amistad vencen al Mal, un Mal que está detrás de todos los actos malos cometidos, propios o de las personas de nuestro entorno social o familiar

"Un niño baja al sótano de su hogar, tiene miedo porque es un lugar oscuro y húmedo. En un momento dado, cree y se imagina que está viendo el destello de dos ojos malignos que le acechan desde la oscuridad. Pero, al encender la luz del sótano, descubre que solo era un reflejo lumínico sobre el cristal de unas bombillas. Posterirmente, Pennywise se materializa ante ese mismo niño en la oscuridad de los subterráneos de la calle, a partir de dos ojos amarillentos que le acechan y brillan en la oscuridad. Las apariciones demoniacas, en la infancia, pueden empezar así, como un juego de la imaginación que va alimentando el miedo y la autosugestión, y dando paso a que "ellos" entren en nuestra realidad"  


"El Diablo siempre nos tienta ofreciéndonos felicidad y bienestar, en el sentido de obtener un progreso económico, integración social, estabilidad y comodidad. La felicidad cristiana se fundamenta en el maná que viene del Cielo y en el espíritu de abnegación, sacrificio y lucha, mientras que la felicidad que nos ofrece el Diablo es una vida de bienestar hasta que la vejez nos convierta en polvo, en palabras textuales del demonio Pennywise durante los últimos minutos de la película y en la batalla final entre el grupo de niños y el Mal, y en el contexto de tener que elegir entre estas dos opciones: arriesgar la vida propia para salvar a un amigo, o escaquearse de la situación y buscar una salvación egoísta y mundana. Si nos fijamos, en ese momento sublime, el momento del triunfo del Bien sobre el Mal, confluyen dos actitudes igualmente altruistas; el niño protagonista está dispuesto a que Pennywise se lo lleve a él para salvar a sus amigos, y sus amigos están dispuestos a dar la cara por él. El posterior pacto de sangre simboliza eso precisamente; la disposición a renunciar a una futura vida cómoda y normal en nombre de una lucha contra el Mal. O, lo que es lo mismo, la disposición a formar parte siempre del grupo de los perdedores


"Un niño obeso, sin amigos, encerrado en una biblioteca, le gusta leer y estudiar, le gusta estar en casa más que salir a la calle, le gusta un poco la soledad, le gusta conocer temas y profundizar en ellos. En un momento dado, mira por la ventana de la biblioteca y ve a un grupo de niños montados en bicicletas, allí fuera en la calle. Pero lo suyo son los libros. Una imagen que resume lo que fue el niño friki y perdedor de los años ochenta"


"Satanás nos quiere siempre divididos. La unión es fuerza de Dios ante la cual el Mal retrocede, la separación es una estrategia de Satanás que nos debilita" 


"El beso final... el beso que muchos no se atrevieron nunca a dar en la cruda realidad ¿no será uno de los besos más bonitos y cargados de significado que se han visto en cine en los últimos tiempos?. Esa mano herida en sangre marcada en el cuello del niño protagonista... ¿qué os sugiere?"  


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Los comentarios son un espacio reservado para el administrador del blog y sirven al propósito de ampliar el estudio de la demonología. Pero cualquiera puede comentar si lo desea. Sólo se requiere atender a los contenidos y algo de creatividad a la hora de participar.